jueves, 27 de septiembre de 2012

Buddhismo


Contexto histórico y religioso

Para entender la innovación que supuso el Buddhismo en su época hay que tener en cuenta el contexto histórico, político y religioso que había en la India del siglo VI a.C. La sociedad védica india se dividía en diferentes castas de mayor a menor rango. Todas las personas estaban condenadas a morir y a renacer indefinidamente, es el eterno ciclo de muerte y renacimiento conocido con el nombre de samsara. Las persona prisioneras del samsara están sujetas a la ley de la retribución kármica. El karma es la energía que va acumulando la persona a lo largo de su vida fruto de sus acciones morales y pensamientos intencionados, y es justamente esta energía la que se transmite en el momento del renacimiento. Si las acciones o pensamientos de la persona son buenos se creará un karma positivo y, por lo tanto, el renacimiento será favorable (en forma de persona bondadosa). Por el contrario, si las acciones o pensamientos son malos, el Karma será negativo y, en consecuencia, el renacimiento de la persona será también negativo (en forma de animal o persona malvada que sufrirá en la vida).
Para que la persona consiga liberarse del samsara tiene que dejar de producir karma, pero para eso es necesario que ponga fin a su deseo, que sus pensamientos y acciones no tengan ninguna finalidad premeditada o intencionalidad ya que estos son la fuente de donde emana el karma. Llegado el difícil momento en que la persona deja de crear karma, es cuando se produce la Iluminación. En el Hinduismo, esta Iluminación se la denomina moksha y en el Buddhismo, nirvana. Aunque no se pueden considerar términos sinónimos que designen la misma realidad, sí que tienen, sin embargo, un punto en común: liberar al ser humano del eterno ciclo de muerte y renacimiento que tanto dolor provoca a las personas.
En la India védica solamente las dos castas superiores, la de los brahmanes (sacerdotes) y la de los guerreros (nobleza), tenían la posibilidad de conseguir la Iluminación, mientras que las demás castas inferiores quedaban condenadas a morir y a renacer perpetuamente como personas de su misma casta. En este sentido, el surgimiento del Buddhismo supuso un gran avance social ya que el  mismo Buddha (Siddharta Gautama) afirmó que todas las personas eran iguales y podían conseguir de igual forma la Iluminación, independientemente de cuál fuera su estatus social o económico.  

La vida del Buddha

El Buddhismo se originó en norte de la India, en las estribaciones del Himalaya. Su fundador, Siddharta Gautama, fue príncipe de un pequeño reino gobernado por el clan de los Sakya que pertenecía a la casta guerrera. El día de su nacimiento, alrededor del año 566 a.C, su padre, el rey Suddhodana, hizo llamar a un chaman que predijo que su hijo se convertiría un día en un gran rey o en un gran líder espiritual. Para que el joven Siddharta siguiera el camino político en vez del espiritual era necesario que su padre le privara de ver la dura realidad que había más allá de los muros de palacio (pobreza, sufrimiento, vejez, muerte, etc.).
El rey Suddhodana quería a toda costa que su hijo le sucediera en el trono y se convirtiera en un gran rey, por eso puso a alcance del príncipe todos los placeres que la vida le podía brindar, para así evitar que el éste tuviera inclinaciones de tipo espiritual.
Siddharta se casó y llegó a tener un hijo, y cuando parecía que su padre se había salido con la suya, Siddharta, que ya desde pequeño había mostrado tener inquietudes espirituales, consiguió finalmente salir de palacio con la ayuda de su sirviente. Allí afuera se encontró cara a cara con la más dura realidad de la vida, descubrió lo que era la vejez, la enfermedad y la muerte, descubrimientos que dejaron al joven príncipe absolutamente traumatizado. En una de sus últimas salidas vio a un asceta errante que estaba pidiendo limosna, y pese que aquel hombre había renunciado a los placeres mundanos, el joven Siddharta descubrió en su rostro una gran expresión de paz y serenidad que le dejaron perplejo. Fue este último encuentro el que le hizo tomar la determinación de abandonar a su familia con la finalidad de encontrar una respuesta al porqué del sufrimiento humano.
Siddharta estuvo vagando de un sitio a otro durante siete años, aprendiendo de las enseñanzas de los gurús que iba encontrando por el camino y siguiendo prácticas de ascetismo radical como el no comer apenas nada durante prolongados períodos de tiempo. Cuando estuvo a punto de perder la vida por causa de este ascetismo tan extremo, finalmente Siddharta se dio cuenta que ese camino no le llevaría a ningún lado y decidió comer. Al poco se cruzo con un maestro músico que le decía a su alumno: “Si las cuerdas de tu instrumento están muy flojas no sonarán bien. Por el contrario, cuando las cuerdas estén demasiado tensadas acabaran por romperse. Es en el punto medio, cuando las cuerdas no están ni demasiado tensadas ni demasiado flojas, que el instrumento suena correctamente”. De aquella enseñanza indirecta, Siddharta sacó una de las enseñanzas más importantes del Buddhismo, la Vía Media, es decir que, el hecho dejarse llevar demasiado por los placeres mundanos  y el hecho de mortificarse infligiéndose dolor en el cuerpo es, en ambos casos, igual de nocivo y contraproducente.
Finalmente, Siddharta se sentó a meditar bajo un árbols situado a las afueras de la ciudad de Bodh Gaya conocido con el nombre de árbol de Bodhi o árbol del despertar. Siddharta tomó la determinación de no volverse a levantar hasta que no encontrarse una respuesta a la causa del sufrimiento humano.  Durante su meditación, Siddharta descubrió lo siguiente: que la existencia  humana  implica necesariamente dolor y sufrimiento, que el origen de este sufrimiento radica en el deseo o anhelo que tienen las personas por poseer cosas materiales, que está al alcance de todos los seres humanos la posibilidad de poder escapar de este dolor, y que para conseguirlo, es necesario  seguir los ocho preceptos básicos del Buddhismo (Noble Óctuple Sendero).
Lo que Siddharta descubrió bajo el árbol Bodhi se conoce con el nombre de las “Cuatro Nobles Verdades” que representan la esencia del Buddhismo, aquello que todo fiel tiene que aceptar como valido para poderse considerar buddhista. Los expertos en Buddhismo suelen comparar las Cuatro Nobles Verdades con un diagnóstico médico, es decir, en primer lugar, se diagnostica la enfermedad (la vida implica sufrimiento); seguidamente sus causas (el deseo y  anhelo son la fuente del sufrimiento humano); después se determina que tiene curación (el ser humano puede escapar del sufrimiento); finalmente, se aplica la medicina (seguir los preceptos del Noble Óctuple Sendero).


Sabiduría (prajña)
 1-    Visión o comprensión correcta
2-      Pensamiento o determinación correcta

Conducta ética (sila)
3-      Hablar correctamente
4-      Actuar correctamente
5-      Medio de vida correcto

Entrenamiento de la
 mente (samadhi)
6-      Esfuerzo correcto
7-      Conciencia del momento correcta
8-      Concentración o meditación correcta



La conclusión a la que llegó Siddharta es que los seres humanos viven en la ignorancia porque son incapaces de darse cuenta que el conocimiento del mundo que nos rodea está constantemente cambiando y que las percepciones que tenemos de él, y sobre las cuales fundamos conocimientos que consideramos como sólidos, son, por lo tanto, erróneos.  Si la percepción que tenemos del mundo está constantemente mutando y no podemos darla como válida, la única certeza inmutable a la que puede atenerse el ser humano es la vacuidad, es decir que, en el fondo, todo es vacio. El hecho que las personas se aferren al deseo y anhelen lo material no es más que una prueba fehaciente de su ignorancia e incomprensión de la vacuidad del universo que nos rodea, por eso, si el ser humano funda su felicidad sobre algo que sólo tiene una existencia transitoria y que tarde o temprano acabará perdiendo, está condenando su vida al sufrimiento.
Esta ignorancia sobre la vacuidad de las cosas es precisamente la responsable de crear el karma que ata a los seres humanos al samsara para que éstos mueran y vuelvan a renacer indefinidamente, prolongando así el sufrimiento humano. Siddharta comprendió la verdadera naturaleza vacua del Universo y renunció al deseo. Llegado este punto, Siddharta entró en una fase irreversible que los buddhistas denominan nirvana, i que se podría traducir de forma vaga con el término cristiano “Iluminación”. Cuando se entra en el estado nirvana, se rompe definitivamente el ciclo de muerte y renacimiento (samsara), eso significa que esa persona ya nunca más volverá a renacer y, por lo tanto, eso supone el fin a su sufrimiento. En ese momento, Siddharta se convirtió en un Buddha, que en sánscrito significa el “despierto”, es decir, alguien que ha entendido la Verdad Última (Dharma). Un Buddha ya no actúa como las demás personas que se mueven por su afán o interés propio, un Buddha es alguien que ha  renunciado a todo en la vida, sus actos son espontáneos y no están motivados por ningún interés material.
Cuando Buddha transmitió estos conocimientos a sus antiguos compañeros ascetas, quiénes le habían dado la espalda por haber traicionado el voto de no comer, es  un momento que los buddhistas denominan el primer giro de la rueda del Dharma. El Dharma es la Verdad Absoluta que Buddha descubrió bajo el árbol de Bodhi, y el hecho de que Buddha la comparta con sus antiguos compañeros de meditación es un momento sumamente importante en el Buddhismo porque marca el nacimiento de la primera comunidad monástica buddhista (sangha). Buddha, con su gesta no solamente ayuda a que sus antiguos compañeros también obtengan el nirvana, éstos también se convierten en sus primeros discípulos y miembros fundadores de la sangha que lo ayudaran a difundir el  mensaje del Dharma por toda la India.
La palabra nirvana significa literalmente “apagar” o “extinguir”, es decir, la persona consigue extinguir el fuego del deseo que quemaba en su interior. A pesar de que ningún buddhista sabe a ciencia cierta cómo es el estado de nirvana, la mayoría sí que coinciden en describirlo como un estado de  paz absoluta. El nirvana de Buddha se divide en dos fases. La primera fase es cuando Buddha descubre las Cuatro Nobles Verdades bajo el árbol en Bodh Gaya, momento en el que deja de producir karma. La segunda fase es en el momento de su muerte, cuando acaba quemando todo el karma residual que quedaba en su persona y entra en un estado que los buddhistas llaman parinirvana o nirvana final, momento en el que la persona muere para no volver renacer jamás.
Tras la muerte de Buddha, sus discípulos, cada vez más numerosos, deciden poner por escrito las enseñanzas de su maestro dando así lugar al primer Canon buddhista, denominado Tripitaka o Canon pali  por estar escrito en lengua pali (la lengua nativa de Buddha).
Con los siglos, el Buddhismo se extendió por todo el subcontinente indio, gran parte del sudeste asiático, Asia Central i Oriental. Sin embargo, ciertas divergencias dentro de la comunidad monástica sobre cómo había que interpretar el mensaje de Buddha dieron lugar a varias escisiones de la sangha. El Buddhismo Theravada o Hinayana (la única de las ramas supervivientes del Buddhismo más ortodoxo) se extendió mayoritariamente por el sudeste asiático (Myanmar, Tailandia, Camboya y Laos), mientras que el Buddhismo Mahayana (que apareció posteriormente) se extendió mayoritariamente por toda la región de Asia Central, Vietnam, China, Corea y Japón.

El Buddhismo en China

El Buddhismo Mahayana penetró en China durante el primer siglo de nuestra era procedente de la India. Sin embargo no fue hasta dos siglos más tarde, después de que cayera la dinastía de los Han en el 220 d.C, que esta religión de origen indio empezó a arraigar en lo más profundo de la sociedad china. Este período de arraigamiento que va desde la caída de la dinastía Han hasta la instauración de la breve dinastía Sui en el 581 d.C, se caracteriza por ser un período de profunda depresión, inseguridad e inestabilidad política. Los motivos principales de que Buddhismo arraigara tanto en este momento son principalmente dos. En primer lugar,  el norte de China estaba fragmentado en una serie de reinos controlados por tribus bárbaras (pueblos de origen nómada procedentes de las estepas del norte). No es extraño pues que, para legitimar su poder, estos gobernantes extranjeros, que había usurpado el poder al pueblo chino, encontraran más atractivo el Buddhismo por tratarse de una religión foránea, antes que dar apoyo a un sistema de pensamiento autóctono como el Confucianismo el cual les era totalmente hostil. En segundo lugar, esta época se caracterizó  por ser una época de profunda depresión y dolor en la cual la gente del pueblo encontró en el Buddhismo un refugio y un alivio a su sufrimiento, refugio que ni el Confucianismo ni el Taoísmo les pudieron proporcionar.
El Buddhismo encontró en el Taoismo algunos puntos en común como por ejemplo, el concepto de la vacuidad o el hecho que las cosas en el Universo estén en un perpetuo fluir i que, por lo tanto, la percepción que tenemos de ellas sólo es una mera apariencia ilusoria y no su verdadera naturaleza. De hecho, durante los primeros siglos desde su introducción en China, el Buddhismo iba disfrazado de Taoismo, hasta el punto que mucha gente confundía los dos sistemas de pensamiento. Esto sucedía porque a la hora de traducir las escrituras buddhistas al chino se emplearon muchos términos que hacían referencia a conceptos taoístas y confucianos, lo que contribuyó a enmascarar el mensaje de Buddha. Sin embargo, poco a poco fueron apareciendo  nuevas escuelas de traducción y célebres traductores como Kumarajiva, que supieron traducir más fielmente al chino los cánones buddhistas.
Por otro lado, hay que tener presente que la introducción del Buddhismo en China no fue una tarea fácil. El Buddhismo procedía de una cultura muy distinta a la china, la cultura india, mucho más espiritual que la cultura china. En una sociedad tan pragmática como la china, en donde la familia y el Estado son una misma cosa, no es raro que muchos de los conceptos Buddhístas jamás fueran aceptados como tal y tuvieran que adaptarse y transformarse a la manera de pensar de los chinos. Sin duda, uno de los aspectos controvertidos y polémicos de la vida del Buddha histórico (Sidharta Gautama) para los chino fue el hecho de que abandonara su familia para ir a buscar la Verdad Absoluta que diera respuestas al sufrimiento humano.
Una vez adaptado a la cultura china, el Buddhismo vivió su edad de oro en China durante las dinastías Sui 隋朝 y Tang 唐朝 (581-907 d.C). Sin embargo, y pese a la gran capacidad asimiladora del pueblo chino, a partir de la rebelión de An Lushan (755 d.C), China se replegó en sí misma y adoptó una actitud mucho más hostil hacia todo lo foráneo. En este momento, el neo-confucianismo fue ganando terreno ante el Buddhismo. Aunque el Buddhismo no desapareció como religión del pueblo, las enseñanzas del Buddha ya no gozaban, como en anterioridad, del patrocinio del Estado imperial, y la comunidad monástica quedó bajo el férreo control del estado imperial. 


La vida de Buddha 佛教的历史


 

 The life of Buddha


 

 The life of Buddha 2


 

Meditación buddhista 




 Buddha- A Documentary About Bouddhism

   

 Buddhismo Zen

  


Clase magistral sobre Buddhismo



Sistema de Castas en la India




Clase magistral sobre hinduismo

  

 Clase magistral sobre el emperador Asoka

 

Páginas web sobre economía, política y sociedad de China 关于中国经济、政治和社会的网站

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Economía, política y sociedad经济、政治和社会


Política de Puertas Abiertas (reforma y apertura económicas de China)
门户开这政策  中国的经济改革开放
Los cambios que ha experimentado China desde la muerte de Mao Zedong en 1976 no tienen precedentes en la historia de ningún otro país del mundo. En menos de 30 años se pasó de una economía socialista deficiente (agricultura colectivizada, propiedad estatal de la tierra y   los medios de producción, inversión extranjera inexistente, etc.) a una sociedad con una economía de mercado que crece a más del 8 % anual. El presidente Deng Xiaoping, quien durante la Revolución Cultural fue una de las muchas víctimas del radicalismo maoísta, fue el artífice de todos estos cambios que ha experimentado China en los últimos decenios. En 1978, Deng Xiaoping tomó las riendas del país y llevó a cabo la llamada “política de reforma y apertura” que tenía como objetivo liberalizar paulatinamente la economía china y atraer la inversión extranjera con el fin de sacar a China del subdesarrollo en el que estaba sumida.
Para conseguir este objetivo, se abrieron cinco Zonas Económicas Especiales en las ciudades sureñas de Shenzhen, Zhuhai, Shantou, Xiamen y Hainan donde se llevó a cabo una economía de mercado a pequeña escala. Estos pequeños “oasis capitalistas” dentro de sociedad comunista china jugaron el papel de pequeños laboratorios de prueba cuya finalidad era experimentar cómo funcionaba una economía de mercado dentro de la China socialista sin correr demasiados riesgos. Como ya bien presupuso Deng Xiaoping, los resultados fueron muy satisfactorios y atrajeron a muchos inversores extranjeros seducidos por las facilidades que proporcionaba el gobierno chino y la abundante mano de obra barata, así que, progresivamente, se fueron abriendo más Zonas Económicas Especiales  a lo largo de toda la costa china. 

China VS The US: The Battle for Oil



 China From The Inside- Power and People


 

 How The West Went Burst

 

New Superpower?


 


China Rises




 China VS US- empires at war